Alumnos brillantes: entrevistamos a Anna Miralles

Anna Miralles tiene 18 años y llegó al colegio en 4º ESO. Cuando el curso pasado finalizó Bachillerato, su media era de 9’95 sobre 10, nota que le otorgó matrícula de honor en la etapa más exigente del instituto.

Aunque actualmente no está centrada en ningún deporte, desde muy pequeña ha practicado natación. A los 12 años también se inició en el waterpolo, deporte que aparcó al iniciar segundo de Bachillerato, pues tenía sus objetivos para los años siguientes muy claros y resultaba demasiado complicado compaginar el deporte con sus objetivos académicos.

Si tuviera que destacar una virtud de sí misma, sería la constancia, ya que lucha por lo que quiere y le cuesta mucho darse por vencida. Esto también le lleva muchas veces a esperar demasiado de sí misma y a ser muy autoexigente, lo que señala como uno de sus mayores defectos.

Entre sus principales aficiones, salir con sus amigos y escuchar música, como cualquier chica de su edad, pero la afición que más disfruta es viajar. A Anna le apasiona descubrir diferentes partes del mundo y culturas variadas, es por ello que planea participar en un voluntariado con niños de una localidad sudafricana próximamente.

Tras terminar Bachillerato, ¿qué has decidido estudiar, Anna?

Desde pequeña tenía claro que me quería dedicar a la medicina, grado que estoy estudiando actualmente en la Universitat de Barcelona.

¿Es muy diferente a tu etapa en el Colegio?

Teniendo en cuenta que este año está siendo especial, sí que veo muy diferente esta nueva etapa en comparación con la del colegio, principalmente por el hecho de asistir a las clases de forma online.

¿Te estás adaptando bien?

El adaptarme a una nueva ciudad y a una nueva vida era algo que me daba mucho miedo, pero todo ha superado mis expectativas. Estoy viviendo en una residencia, así que convivir con otros 100 estudiantes que están en la misma situación que yo me ha sido de gran ayuda.

¿Cómo se consigue mantener tu nivel académico durante una crisis sanitaria como la que hemos vivido?

La verdad es que el hecho de que del día a la mañana nos dijeran que no podíamos salir de casa fue un golpe duro. Sin embargo, el colegio nos puso muchas facilidades para seguir dando las clases desde casa. Aun así, estudiar como lo hacía antes no fue fácil. El saber que la Selectividad iba a mantenerse y el hecho de tener muy clara la carrera que quería estudiar fueron mis puntos fuertes a la hora de mantenerme constante con los estudios.

¿Qué técnicas de estudio utilizas?

La verdad es que nunca he seguido unas técnicas de estudio marcadas, pero algo que he hecho desde siempre es establecerme unos horarios con lo que debo hacer cada día. Eso sí, horarios asequibles para poder cumplir con todo.

¿De qué forma consideras que ha influido el Colegio en tu desarrollo académico?

Mi paso por el San Cristóbal ha sido crucial en mi desarrollo académico. Por una parte, el uso en todo momento de las tecnologías es algo que, sin darme cuenta, me ha dado una fluidez que ahora en la universidad noto muchísimo. ¡Y más ahora que lo hacemos todo de forma virtual!

Por otra parte, en el colegio me hicieron ver que hay mucho más allá de los libros y que no solo es importante ser bueno académicamente, sino forjar unos valores que nos acompañen a lo largo de toda nuestra vida.

¿Qué es lo que más valoras de tu paso por el cole?

Lo que más valoro de mi paso por el San Cristóbal es la relación con los profesores. No son solo personas que te explican la materia, sino que se preocupan por ti, por cómo te sientes, te regalan una sonrisa cada mañana y te ofrecen ayuda y consejo en todo momento. La relación que se crea entre alumnos y profesores es muy especial, se convierten en tus confidentes. Yo, personalmente, he creado un vínculo muy bonito con profesores con los que sigo en contacto.

¿Cómo compaginas tus estudios con tu vida social?

Siempre digo lo mismo cuando me preguntan por cómo compagino mis estudios con la vida social. La respuesta es sencilla: con organización. Hay tiempo para todo si lo aprovechas bien. La verdad es que segundo de Bachillerato es un año duro, pero yo en ningún momento tuve que renunciar a planes con amigos por estudiar, simplemente me organizaba los días en función de lo que tenía previsto hacer.

¿Qué consejo les darías a los estudiantes que están cursando ahora Bachillerato?

A los que estáis estudiando ahora mismo os digo que os esforcéis al máximo porque, de verdad, merece la pena. No es fácil, y lo que os digo os lo habrán dicho mil veces, pero tiene recompensa. Como consejo os diría también que no os obsesionéis y disfrutéis de estos dos años porque son los últimos que pasaréis con vuestros amigos de siempre y, aunque parece que pasan lentos, sin daros cuenta en seguida os estaréis graduando.

Para terminar, háblanos de tu trabajo soñado, ¿a qué te gustaría dedicarte cuando termines tus estudios?

Al acabar la carrera me gustaría especializarme en cirugía, pero tengo como posible opción también la pediatría. No sé muy bien hacia qué me decantaré finalmente.

Aún tienes tiempo para averiguarlo. Muchas gracias por tu tiempo, Anna. Deseamos que tu etapa universitaria sea muy satisfactoria, tanto en lo académico como en lo personal. ¡Ven a visitarnos cuando quieras!